I follow the Moskva
Down to Gorky Park,
Listening to the winds of change.
(Wind Of Change – Scorpions)
Atardecer con cafecito en Moscú.
Aquí estamos, cansadísimos, con los pies que se sienten hinchados, con las piernas que se sienten al borde de los calambres, con los hombros doloridos pero contentos y satisfechos de haber pasado otro día en esta ciudad!
Hoy fue un día intenso pero cómo se entiende que también fue tranquilo?
Habrá sido porque paseamos tranquilos y con placer, inspirando los aires de Moscú, regalándole a los ojos vistas muy bonitas?
También fue un día de mucha historia pero cómo no serlo aquí, no es cierto?
Anoche reservamos por email un tour gratuito y a pie por la ciudad, de aproximadamente 2 horas y media de duración que encontramos promocionado en esos mapas que te suelen dar en los hoteles.
Fuimos con retraso, la cita era a las 10.30 am pero llegamos 10.52 y por suerte no empezó hasta las 11 am, menos mal! Pavel, o Paul, fue nuestro guía, muy simpático y hablaba per-fec-to inglés así que no hubo problemas con entenderlo, un alivio realmente.
Nos encontramos en la plaza de Slavyanskaya, donde hay un monumento a los santos Cirilo y Metodio, apóstoles y hermanos quienes llegaron a donde hoy es Rusia y desarrollaron el alfabeto cirílico, que es el que se usa en estos lares.
Cirilio y Metodio.
De allí cruzamos a la Iglesia de Todos Los Santos, una de las más antiguas de Moscú y que no fue demolida o destruida por el régimen soviético. Fue construida en 1380 y vuelta a construir en 1488 pero en 1930 fue cerrada y utilizada como sede del NKVD (predecesor de la KGB) donde también se torturaban y ejecutaban personas.
La Iglesia de Todos Los Santos.
Paul nos comentó que nos encontrábamos en una zona que podría traducirse como Chinatown pero que no tiene nada que ver con ese país!
Cómo se entiende?
La zona donde estábamos se llama Kitay Gorod pero es porque Kitay es una deformación de la palabra “Kita” que significa madera pero “Kitay” significa China y “Gorod” significa ciudad.
Nos mostró luego un muro que se encuentra a la vuelta de la iglesia, levantada entre 1536 y 1539 y originalmente tenía 13 torres.
Lo que queda hoy en día.
De allí caminamos por la calle Varvarka donde encontramos algunos edificios históricos. Por ejemplo:
Aposentos donde vivían los Romanov cuando todavía no fueron dinastía.
Su capilla privada.
Primera embajada de Inglaterra en Rusia, de la época de Isabel I.
Paul nos mostró también esta zona donde se encontraba un hotel que en su momento fue el más grande del mundo, el Hotel Rossiya. Contaba con 3200 habitaciones y 245 suites y fue demolido en 2006 y se espera la construcción de un shopping centre.
Mientras tanto, tenés esta vista, ahí donde hay escombros, ahí estaba el hotel.
Y volvimos a la Plaza Roja. Ahí se lo ve a Paul explicando.
Por qué “roja”?
Muchos piensan en sangre, otros en el color tan usado por los soviéticos pero aparentemente la palabra en eslavo antiguo usada significa “hermoso”.
Vimos el Lugar de las Calaveras, una plataforma desde donde se anunciaban las ejecuciones en tiempos antiguos pero parece ser que es un mito que allí mismo también se realizaran.
De todas formas, como siempre pasa en todo el mundo…
Donde haya un hoyo, allá va la gente a tirar monedas y a pedir deseos!!!
Entonces ya era el mediodía, casi la 1 de la tarde, la hora del cambio de guardia en el Kremlin, más precisamente donde se encuentra la Tumba del Soldado Desconocido.
Este soldado estaba para vigilar que nadie se acercara demasiado.
Si eso sucedía, hacía sonar un silbato y hacía señas para que se movieran para atrás.
Luego comenzó la ceremonia.
Muy corta, qué habrá durado? 2 minutos como mucho.
Y caminamos un poquito más hasta una plaza cercana donde hay unos edificios bonitos.
Nos despedimos de Paul no sin antes hacerle algunas últimas preguntas.
Fuimos a almorzar al patio de comidas de un shopping donde se puede comer comida rusa con un toque fast food.
Pero antes me maravillé al encontrar lo siguiente:
Esculturas sobre las fábulas de Esopo. Las reconocen?
Y de allí emprendimos una caminata aventurera que nos llevó todo el resto de la tarde hasta terminar en el Gorky Park.
Se pusieron los zapatos más cómodos que tienen? Los van a necesitar!
Bordeamos un poquito del parque que está adentro del Kremlin.
Luego vimos estos edificios lindos.
Pero la caminata en sí la comenzamos yendo a ver la Catedral de Cristo Salvador, famosa por tener la cúpula con forma de cebolla, más grande de todas las iglesias ortodoxas. (Bueno, al menos en inglés, a ese tipo de cúpula con esa forma se les llama “onion” que significa cebolla!)
Como se imaginarán, esta belleza fue demolida en 1930 pero fue reconstruida en 1990.
Fue en esta iglesia donde las chicas de Pussy Riot filmaron su video en contra de Putin y por el cual fueron encarceladas y todavía se encuentran cumpliendo la sentencia.
Como dijo Pavel: “En Rusia hay libertad de expresión. Lo que no está garantizado es la libertad después de la expresión!”
Hermosa vista desde el puente peatonal Bersenevskaya.
Realmente, desde el puente mismo pudimos sacar hermosas fotos.
Una vez que bajamos nos desviamos buscando unas esculturas que no encontramos y volvimos a subir a un sector del puente para seguir caminándolo.
Recorrimos un sector donde pasa la movida rusa.
Antes nos sentamos un rato y ya que estábamos nos pusimos a mirar el video de Scorpions, Wind of Change. Cantamos (bah, canté yo un poco) y seguimos la caminata.
Seguimos el Moskva (el río Moscú), obvio porque teníamos entre ceja y ceja fotografiar el monumento de Pedro El Grande, una colosal estatua de 98 metros de alto que se encuentra en una isla.
Claro que no sabíamos que estaban acondicionando el paseo pero no hubo problemas, pudimos inmiscuirnos entre los trabajadores como si nada!
Acá no había vallas ni nada que impidiera la entrada! Esto en otro país no pasa!
El monumento se erigió en 1997 para conmemorar los 300 años de la Armada Rusa.
A muchos les parece horrible, a mí me pareció increíble y muy original. Me gustó.
Encontramos luego un hermoso paseo, el Parque de las Esculturas.
Aquí vas a ver más de 700 esculturas al aire libre, distribuidas por secciones.
Pero la que más llama la atención es la sección donde hay muchas estatuas e íconos soviéticos que fueron desmantelados o tirados abajo por la gente cuando colapsó el régimen soviético.
Muchos no están sobre sus pilares.
Para este entonces nuestras piernas estaban en piloto automático: andaban solas! Creo que ya nos habíamos sobrepasado de cansancio pero estábamos ahí nomás del Gorky Park así que seguimos.
La entrada al parque.
Hermoso realmente.
Mucha gente descansando.
Disfrutando del lago.
Se puede alimentar a los animalitos! Acá podés comprar sus alimentos!
Y con las últimas fuerzas, sacamos unas últimas fotos ya que nos hubiese sido imposible recorrer este parque de 120 hectáreas!
Qué tal nuestro segundo día? Todavía no puedo creer que esté despierta!
Gracias por haber pasado!
Jaja, mi teoría es que la gente ve un charco, se da vuelta y tira una moneda (o cruza un puente con rejas y le cuelga un candado), pero sin agua no lo había visto nunca..
Buenísimo el viaje!!
Suerte
Cuánto eclecticismo en las construcciones todas de diferentes estilos pero todas hermosas a su manera creo que aparte de toda ideología es un gran país.
No paras Alicia, que suerte tienes de poder viajar tanto.
La estatua de Pedro I parece C. Colon.
Allí todo es enorme, esa sensación la tuve en Berlín. Debe ser típico de los paises del este.
Te digo? Es increíblemente hermoso todo lo que mostrás en las fotos! Ni quiero imaginarme verlo en vivo y en directo!
Me gustan las estatuas, la de Pedro, el grande me pareció FABULOSA! A quién no le gusta??? (O es muy farolera y por eso me gusta?).
Lindos los colores en el Gorky PArk… colores de otoño en los árboles cerca del lago.
Sigan, sigan!!
Más, más!
beso.
Ana nunca pensé que iba a viajar tanto con vos jajajaja !!!!
Gracias por compartir tus viajes !!!
Qué lindo!! Todo se ve tan prolijito!!! Muchos colores!!
En Argentina también se dice “cúpulas acebolladas”, y sí remite a la forma de la cebolla!! Es una característica de la arquitectura Rusa (por lo menos es lo que nos ensañan en la carrera de arquitectura).