En esta segunda parte del programa, John Torode decide ir a Mendoza. Le contaron que allí hay un lugar especial, un lugar considerado un templo a la carne.
Decide tomar la ruta y una de las paradas es San Antonio de Areco.
Fue a visitar una carnicería que le recomendaron.

Dice que en el Reino Unido mayormente se corta las costillas y con el resto se hace carne picada.

Y qué te hacés con eso?


Primera parada en un pequeño negocio al costado de la ruta para comprar provisiones.





Fascinado también por el hecho de que en un lugar así, un sitio donde paran los camioneros al costado de la ruta y comés lo que comés!


John dice que él, de hacer un asado, primero encendería la madera y el carbón en una parrilla y luego pondría la carne. Aquí se dio cuenta que, en realidad, lo que debería hacer es encender la madera y el carbón y mantenerla aparte.
Y luego poner la carne.

En el camino, hizo una importante confesión.

Siguió manejando y encontró a un señor horneando pan al costado de la ruta.

Quiso probar el pan y le preguntó cuánto costaba. El señor se lo regaló y él insistía en pagarle pero el señor dijo que no, que se lo llevara.

Y así llegó a Mendoza, más precisamente a Tunuyán, a conocer Siete Fuegos, el restaurant de Francis Mallmann.

En el restaurant explicó y mostró los siete fuegos que hay donde se asan diferentes tipos de comidas, desde verduras, pan hasta la carne, por supuesto.
Estuvo hablando con el chef, Diego Irrera.

Sólo una vez vio un corte así y lo llaman el “Tomahawk”.
Es parte de la costilla y algo que él describió como “el ojo de la carne” o “eye of the beef”.
Se sorprendió que en este lugar que es tan caro y tan elegante y lujoso, hacían el asado de la misma forma que en la parrilla de camioneros donde almorzó el día anterior.


Y algo para agregar sobre el cocinero…

Y así finaliza el programa, contándonos que él es quién es y hace lo que hace “John Torode es alguien que cocina y ha sido lo suficientemente afortunado de haber manejado por Argentina…”

Te gustó? Honestamente, un gran programa! Creo que todos aprendimos algo y, a la vez, qué orgullo ver cómo disfrutan de nuestras costumbres y gastronomía!
Me encanto tu review de la nota.
Gracias FlorBA!!! Besos!
Ali, no sabés, se me hace agua la boca! jajaja…y eso que no me levanto los domingos para comer asado en lo de mis viejos…creo que este domingo madrugo! jajaja
Muy lindos post!
Gracias Verónica y suertuda Verónica que podés comer asado todas las semanas!! 😀 😀 😀 Besos!
Plas, plas, plas, plas, plas ….(aplausos levantada del asiento).
Nada mas que añadir.
Beso
Gracias Ana! 😀
Si bien no como carne, es curioso ver como un extranjero y encima cocinero se deleita con nuestras tradiciones.
Si vemos como hacen el asado en otros países se nota muchísimo la diferencia.
En España la carne se come casi cruda, mi marido tiene que pedir hasta dos o tres veces que la cocinen más.
Muy buenos ambos posts, creo que cuando estamos fuera y vemos algo así nos atrae muchísimo ver qué piensan los de afuera de nosotros. Muy curioso todo. Besos!
Exacto Belén!! Es tal cual lo decís y John Torode lo ha mostrado todo con respeto y con mucha alegría!
Ali!!! que buenos posts!! enganchamos con Jacko una noche una parte del anterior … extraño comer un buen asado! #listolodije
Por supuesto, Paula!!! Todos los que vivimos afuera extrañamos el asado!! Y todo su ritual, por supuesto!
Me encantó! Me encanta cuando vienen extranjeros y descubren las cosas buenas que tenemos y las muestran al mundo.
Da mucho orgullo, no, Sil? 🙂
Me acuerdo que mi cuñada y sus padres (Galeses) cuando vinieron por primera vez a la argentina, si asombraban de poder ver el horizonte….la cantidad de km y km de solo campo….es muy loco para nosotros que convivimos con eso, no?
Beso grande!!
Totalmente! La pampa parece infinita! Me encanta salir a la ruta y verla!
Hermoso post! No se porqué me emocioné y me generó una cuota de orgullo que no estoy muy acostumbrada a tener. Acá en Bariloche, sobre todo en verano, la parrilla la prendemos, mínimo, una vez por semana. Soy originaria de “el pueblo de al lado de San Antonio de Areco” Capitán Sarmiento, y sé lo que son esos asados.
Y amo profundamente cuando alguien se sorprende tanto con algo que para nosotros es normal.
Esta noche sale parrillita 🙂
Gracias Alice! Sos una genia.
Fedra, linda, gracias a vos por pasar y comentar! Qué lindo saber que te emociona porque el asado significa más que poner carne a la parrilla! Que disfrutes del asado este finde y comete una costillita por mí!!! 😀
Muy bueno y muy completo el post… casi como ver el programa! 🙂
Si aca tenemos carne muy rica, alfajores, etc… lindo que se sorprendan para bien los que llegan a conocer..
beso
Estela, es así, recuerdo unos chicos británicos que estuvieron en Argentina cuando vivíamos allí todavía y les sorprendía la calidad de la comida. 😀
Qué trabajo te mandaste, gracias por compartirlo! Creo que cuando vivimos afuera estas cosas nos dan más orgullo, sobre todo ver la hospitalidad de la gente. A mi cada vez que alguien me dice que visitó Argentina y cuenta solamente cosas buenas me inflo! Aunque ineludible que después venga la pregunta: si tenemos tantas riquezas, tanto talento, etc, cómo está como está el país? Tan difícil de contestar, ayyyyyyy
Beso! Rox
Hola Rox! Es la pregunta del millón pero la respuesta la encontrás viviendo afuera: Es la corrupción!! Besos y gracias por pasar y comentar!
Muy bueno!, recién lo encontré en youtube y ya vi una parte. Lo malo es que no tiene los subtitulos en ingles y me pierdo algunas palabras, gracias por compartirlo.
De nada, Juan Manuel, gracias a vos por pasar y comentar!
Alicia, qué lindo post. Qué bien contado por vos y por él en el programa. Cómo te dije en el anterior, tenemos que valorar lo rico que se come y nuestra carne. Besos
Gracias, Patricia! Totalmente! Qué rica es la carne argentina!!!
Hola, mi comentario no tiene que ver en especial con ésta entrada del blog sino en general con el sitio. En enero murió mi marido, toda mi vida está patas para arriba, los tiempos de mi vida son ahora otros ahora, hay momentos en los que me refugió en internet leyendo un poco de todo y desde hace días en los ratitos que le dedico a la compu, sobre todo antes de dormir leo tu blog, mirando entradas viejitas; algunas son para pensar, reflexionar un poquito o para sonreír y hasta reír. Con tu calidez y encanto estás siendo una gran compañía en esos momentos. No quería dejar de comentartelo porque creo que a veces uno no se da cuenta de lo bien que puede hacerle a otro y por otro lado pienso que te va a gustar saberlo. Te sigo leyendo. Gracias y un abrazo.
Candela querida, qué emoción leer tu comentario! Me llegó al corazón y agradezco tus palabras. El ida y vuelta que se da a través del blog con los lectores es muy reconfortante. Te mando un beso gigante y que puedas salir adelante! Abrazotes!
Lo acabo de ver en Youtube, y estoy babeando el teclado jajaja Tristísimo lo de la soja!!! Narda lo llevó a la Feria de Mataderos, solo faltó Julio, el santiagueño que solía animar la feria los domingos. Qué divertido verlo que necesita ayuda para montar jajaja Hoy se lo muestro al marido. Un abrazo fuerte Alicia!!!
Gracias Fabi! Besos!
El otro día hablábamos de Torode con Sean. Se desilusionó mucho con los feedlots. Pero los dos no babeábamos con la “nerca”. Ni enTexas, eh! Mirá lo que te digo!
Uh, no sabía de la carne de Texas!! Habrá que probarla!! 😀
Me gustò ! ahora tengo ganas de comer asado! Olvidò probar el alfajor la vauquita! Flor de alfajor!!!
No sé si probó el alfajor de Vauquita pero agarró uno de cada marca! Cada vez que vuelvo a Argentina me sorprendo porque siempre hay dos o tres marcas nuevas de alfajores!! 😀
En el grupo de fotos en el que debajo pones “Fascinado con la parrillita!” última foto de la izquierda, lo negro son morcillas?
Yo lo que siempre he oido es que los argentinos cortan la carne de forma diferente.
Vosotros lo haceis siguiendo la veta y esto hace que la carne al cocinarla quede más blanda y jugosa y aqui se corta de forma que se aprovecha más y salen más filetes. A mi me gustaría que pensaran en el paladar en vez de en el dinero.
Me ha encantado el reportaje.
Siiii, las morcillas!! Me encantan! No tengo idea de los nombres de los cortes de carnes pero sí sé que es como decís vos, que en otros lados no he visto los cortes que ves en una carnicería típica de Argentina. Me alegro mucho que te haya gustado el post, siempre tenés lindas palabras Pilikina! 😀
Me encantó el asunto de las brasas, son cosas que damos por sentado porque nacimos por estos lares, y es increíble que en otros lugares no se hayan avivado de tener el fuego al costado de la comida e ir cociéndola con el calorcito de la brasa para tener todo más controlado. Es una lástima que para cocinar verduras eso me parece que no es tan importante, bah, quizá los vegetarianos del río de la plata deberíamos hacernos masterchefs en cocinar las verduritas a las brasas jaja, pero me acuerdo de mi abuelo, que era un gran asador, tenía todos los secretos del calor, la altura de la parrilla, ponía la mano sobre las brasas y sabía más o menos a qué temperatura estaba cocinando (era un tipo muy obsesivo, muuuy), pero sacaba la carne especialmente para cada comensal según su gusto, todo al mismo tiempo! No sé si este señor habrá hablado de eso, pero la verdad que para mí, al margen de ser vegetariana y que lo que es un festín para muchos me parezca una barbaridad (barbarians, como dicen ellos!), el real talento de un buen asador se ve ahí, cuando en el momento de servir tienen distintas piezas a distintos puntos de cocción según las preferencias de los comensales. ¡Me maravilla!
Saludos y te digo la verdad, siendo uruguaya y vegetariana me pareció que estuvo bueno igual. La próxima contame qué dijo de los alfajores (que son re distintos a los que hay acá pero no importa, cuando cruce el charco compro alguno)
Wow, qué interesante lo que contás lo de tu abuelo y encima sacaba la carne a gusto de cada comensal al mismo tiempo!!! Eso nunca lo escuché y me parece extraordinario! Justamente, en Siete Fuegos, uno de los fuegos es para las verduras y no sabés qué ricas y apetitosas parecen!!! Gracias por tu comentario, besos grandes!
Lo que se comió es el famoso “Ojo de bife”, un corte de carne carísimo que se extrae del centro de la chuleta. No lo hacen en cualquier lado, yo lo comí en una parrila llamada “El Boliche de Alberto” en Bariloche, y era algo paradisíaco.
En algunas carnicerías se puede pedir que te lo corten así. Pero nunca lo cociné. Que tentación !!
Saludos Alicia !!
Saludos Miguel, qué bueno tu comentario! 😀 Gracias!