No uso reloj hace bastante porque como muchos de nosotros todos, me fijo en el celular. De todas formas, he de reconocer que tengo un buen concepto del tiempo, de las horas, los minutos y entonces puedo decir que no soy una “colgada” que llega tarde a todos lados.
A la mañana, por ejemplo, mientras estoy desayunando y leyendo el diario, llega un momento en que solita me fijo la hora y es siempre menos 10, el momento en que tengo que ir a cambiarme y salir a trabajar.
Pero hay momentos en que realmente el tiempo vuela. O se me escapa. No sé qué pasa pero me quedo tan estupefacta cuando eso pasa que creo estar en otra dimensión. Cómo puede ser que no me di cuenta?!
El mejor ejemplo que tengo para darte de sentirme en otra galaxia con respecto al tiempo es en el aeropuerto. En cualquier aeropuerto, no importa si estoy yendo o volviendo, ahí algo pasa…
Magnetizan el aire? Los relojes tienen vida propia? Entramos a otra dimensión? Te juro que siento que algo se apodera de mí y me controla y de repente me doy de narices contra la realidad de que el tiempo ya pasó y mejor que salga corriendo que pierdo el vuelo!
A mí me gusta ir con tiempo, me gusta hacer el check-in y pasar por seguridad tranquila, ir al lounge a comer algo y a leer y relajarme. Cada vez que estoy por entrar, le pregunto a Ale cuánto tiempo tenemos y generalmente es una hora y media o algo así. Tiempo suficiente para hacer todo lo que tengo en mente.
Puedo estar de lo más entretenida que, así como si nada, Ale me avisa que vaya al baño que nos vamos. Pero cómo!? Recién llegué! Bueno, no, se ve que esa hora y media o dos que tenía para gastar se consumió en veinte minutos!
No me podés decir que tengo unos pocos minutos para ir al baño! En consecuencia voy pero rápido, agitada y casi corriendo a tomar el avión.
Más acá en la vida terrenal y cotidiana, el tiempo se me vuela a la noche. Yo ceno temprano, a las 6pm y entonces me quedan unas lindas horas para ver tele o escribir o no sé. Y siempre pienso: “Bueno, hoy aprovecho y me voy a dormir un poquito más temprano. Me meto a la cama, leo un poco y para mañana me levanto bárbara y descansada…”
“… A ver qué es esta notificación de Instagram… Pará, alguien vio mi tweet que escribí hoy?… Me contestaron ese mail que mandé a… Qué subió ahora en Facebook?…”
Y “cinco minutos después”, veo con horror que se pasaron como 3 horas de nada y cansada, agotada y enojada conmigo misma me voy a dormir… muy tarde!
Te pasa a vos igual? En qué ámbito? En casa? En el trabajo? Cuando tenés tiempo libre?
Contame!
Jajaja me pasa lo mismo, cada vez que reviso el celular mirando las redes sociales! Miro las notificaciones de Facebook, un ratito el muro… después chusmeo las historias de Instagram… pero un ratito, pienso. Y cuando miro la hora, pasó una hora y media! Cada vez me cuesta más despegarme del teléfono 🙁
Lo que estoy probando ahora es dejar el teléfono enchufado lejos de donde estoy, y tener siempre un libro a mano para leer. Viene funcionando!
Muy bueno tu truco, Paloma! Pero eso de pensar que es “un ratito” a mí también me pasa y se pasan las horas!! 😀
Tal cual!! A veces se me pasan las horas volando!!! También solo uso el celular, desde que se me rompió un reloj que quería mucho, nunca encontré otro parecido!!! Jajaja amo el conejo de Alicia….
Sí, Marchu, el celular para todo! 😀 A veces quisiera comprarme un lindo reloj y después me pregunto para qué si no lo voy a usar!! 😀
Exactamente igual por acá Ali…. la curiosidad por leer un blog, ver una serie, tuitear, cocinar y muchas cosas más. hace que me vaya a acostar tarde, preguntándome en que invertí mi tiempo jaja
Besos!
Betty, a vos también te pasa!! Y qué frustración!! Besos!
A mi me pasa en el trabajo, para cuando me doy cuenta ya es hora de irse!!
Ah pero que te pase en el trabajo es genial! 😀 Llegás y te vas, ni lo sentí!!! 😀
Por experiencia propia, nunca, nunca decir “hoy me voy a dormir temprano´´. Siempre que lo he dicho, me termino acostando más tarde de lo normal; entonces, trato de no decirlo en voz alta porque parece que una fuerza de no sé dónde te escucha y zas, te juega una mala pasada! Es como si ese ente, fuerza o yo qué sé te dijera: “ Ah…chiquita, así que vos te querías acostar temprano!!! (con tono burlón) Ahora vas a ver, te voy hacer acostar más tarde que nunca!´´. Así que gente, por las dudas no decir “me voy a acostar temprano´´ en voz alta, jajaja.
Y con respecto al tiempo que pasa rápido, por DIOOOOOSSSSS, YA ESTAMOS EN NOVIEMBRE!!! y para mí fue ayer que comenzó el año, INCREÍBLE!!!
Eugenia, voy a ver si pongo en práctica tu costumbre de no decir nada… Por lo menos no me sentiré muy culpable!! 😀 Sí, yo tampoco puedo creer que YA es noviembre!! Besos!
Hola Ali!
Me pasa últimamente, y como varios de los comentarios, se lo atribuyo al celular. Entre que miras twitter, las historias de instagram o algo en los blogs y ya se me pasaron dos horas.
Y si veo algún capítulo de una serie, ya está… se me pasó la noche y son las 12am y ya me tengo que acostar.
Buen día y besos!!
Muy parecido, Gise! No entiendo cómo, con tantas cosas que hay para ver en un teéfono, no nos hartamos y cortamos un rato!! 😀 Nos atrapa!
Hola Alicia!
Que tema el paso del tiempo, o la percepción que tenemos del paso del tiempo mejor dicho. Como comentan muchos me pasa igual con las cosas cotidianas, de noche sobre todo que digo listo me acuesto temprano y se me van 3 horas en nada…!!
Igual a mi lo que más me impacta y donde más percibo el paso del tiempo es con mis hijos; con niños chicos los días pueden ser eternos y agotadores pero los años, pasan volando! A veces cuando puedo realmente parar y los miro no puedo creer que esa nena que graba vídeos musicales es la misma beba que traje del sanatorio en lo que para mi fue ayer….y pasaron 8 años y dos hermanos más! Una locura.
Ahí te das cuenta que cada segundo cuenta y que hay que disfrutar más allá del cansancio…parezco una anciana pero es así!
Besote
Muy cierto, Eliana! Con los niños que crecen, el paso del tiempo en años hasta a veces parece muy rápido!!! No creo que parezcas una anciana pero que seguro el crecimiento de los chicos te hacen sentir así, no hay dudas!! 😀 Besos y gracias por pasar y compartir!
Hola Ali! sabes que nos pasó algo asi hace poco! Tampoco uso reloj! porque tengo el celular. Este mes fuimos de vacaciones con Mario y las nenas a Brasil y como habiamos alquilado auto lo dejamos antes de las 3 de la tarde para llegar al vuelo a BS AS tranquilos que era a las 18.55. Digamos que teniamos tiempo de sobra para recorrer y comer algo no? Bueno despues de comer algo tranquilos voy con Isa al Toillet y cuando salgo noto que Mario esta como impaciente…… cuando llego le digo se que tardamos pero Isa quiso hacer el número 2! no la podia apurar! y me dice no son las 17.10hs! y supuestamente embarcabamos a las 17.30hs!!! (cosa que estaba mal en el ticket y que no informaron mal en el chek in era a las 18.30)
Corrimos por el aeropuerto de Rio que es enorme! creo que facilmente tardamos 20 minutos en llegar a la puerta del avión!!!!
Ni pudimos ir al free shop! nada. Pero bueno al final llegamos con tiempo para comprar algo mas de tomar y subir tranquilos y primeros al avion (ventajas de ir con Bianquita que todavia no cumplió 2 años)
Besos!
Paula, me quedé sin aliento con solo leerte! Qué desesperación!!! Menos mal que esta odisea tuvo final feliz!! 😀 Besos!
Es que además nos malcriás, y respondés todos y cada uno de nuestros comentarios! Sos una genia, saludos para ambos!
Gracias, Alejandro! Me hizo gracia eso de que los malcrío!! 😀 😀 Si vinieras a casa, te malcrío a comida!! 😀 😀 😀 Siempre asocio “malcriar” con “dar de comer”, no sé por qué!!! 😀
Hola Alice! Hace algo más de un año que volví a usar reloj de muñeca. Me lo regalaron y me copó… ahora cuando me olvido de ponérmelo lo extraño.
Lo mejor es que evito estar mirando el celular para saber la hora… pasa que cuando veo el celu me cuelgo con otras cosas y desperdicio tiempo, mucho, sin darme cuenta… tal como decís que te pasa en la noche.
Besos, buen finde!!
Buena estrategia la tuya, es cierto, si mirás el celu por la hora, te terminás enganchando con otras!