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Comer En IKEA

Como te conté, IKEA tiene un recorrido pre establecido así que cuando se termina, lo que ves ante vos es el restaurant! Y ahí te acordás de que es hora de disfrutar de un late breakfast o de un almuerzo o de tomarte el té o de cenar tempranamente!
O de darte un gusto!
Oh, el restaurant! En el sofá, un señor que se nota ha quedado rechonchito!!
La comida es rica, es sana según cómo la combines o lo que elijas y es muy conveniente con respecto a los precios.
No sólo come la gente que va a comprar (o a pasear!) a IKEA, también suele ir gente que trabaja cerca.
A mí siempre me pasa que me tiento con esto y aquello y los platos parecieran pequeños pero no sabés cómo llenan!!!
Es self-service y tiene unos cuantos detalles y “beneficios” que te paso a mostrar!
Qué te servirías?
Te recomiendo agarrar un carrito para ir poniendo la comida sobre la bandeja cómodamente.
 Tomás una bandeja y un plato.

Qué estrategia será esta que ponen los postres primero?

 Las entradas frías, ensaladas varias y wraps.

 Las bebidas y gelatinas. Siempre elijo un agua de elderflower.
Ahora, im-por-tan-te!
Si vos querés tomar gaseosas, entonces estás de suerte: Acá podés servirte gaseosas ilimitadamente. Así que no te sirvas de las botellitas! Esperá hasta llegar a las cajas.
Está la sección de comida caliente y las ensaladas “para armar”.

Los pancitos.

Bueno, ya tenemos todo? Vamos a la caja!

En la caja vos podés tomar un vaso y también una taza para que te cobren la bebida. Porque, como dije antes, las gaseosas y tanto el café o té o leche lo pagás una sola vez y te podés servir las veces que quieras!

De acá te servís las bebidas y las servilletas.
 
De acá, los condimentos y los cubiertos del otro lado.

 Listo, Natalia!!! A comeeeeeeeeeeeeeeeeeer! Fish and chips!

Mientras almorzábamos, notamos que ahí mismo hay un café, por si se te antoja algo dulce.

 Cualquier porción de torta o muffin o lo que sea más un café o té, a ese precio.

Después de almorzar, fuimos al “depósito” a elegir lo que compramos eventualmente y decidimos tomarnos un tecito.

Ya era la hora del té.

 
Y comimos esto.

Te cuento que si te gusta mucho lo que comés, todo eso lo podés comprar en el supermercado de IKEA.

 Entrás por acá.
Al costado, ves estas tarjetas con recetas y podés tomar las que quieras.

Toda la variedad de pescados.

Los congelados y galletitas.
Salmón y las famosas albóndigas suecas.

 Café.

Al supermercado llegás cuando te estás yendo, o sea, cuando pasás por las cajas donde pagás lo que compraste de muebles, decoración, etc.

Para nuestra sorpresa, también a la salida estaba esto:

 El Bistro. Comidas rápidas.

Y postres rápidos, también!!!

Te gustó este tour gastronómico por IKEA? A mí me dio hambre!!

14 thoughts on “Comer En IKEA

  1. ¿Hay algo que NO tenga Ikea? Porque a mí me gustó todo, desde los muebles hasta la comida!
    Increíble que hasta tenga un supermercado, estaría queriendo comer ya.
    Sí, tengo que ir a Ikea.

  2. jaja yo tambien soy ikeista asi que comparto tu sentimiento de felicidad! si me quedara cerca iria a comer mas seguido, menos mal no es cerca si no quiebro!
    Pasaba a decirte que te nomine para un premio quizas quieras participar, tuve que editar la entrada por problemas tecnicos ( falta de gafas jaja), pasate por el blog que explico que tienes que hacer si te interesa. Un saludo

  3. HOLA, conozco Ikea y me gusta, pero para mi es “peligroso” por que como el señor de la foto me quedo rechonchita por mucho tiempo. Saludos

  4. Muy bueno tu recorrido virtual, pero la comida….. en fin. Preguntas por qué ponen los postres primero. Muy fácil. Puro marketing, llegas con hambre y ¿cómo vas a renunciar a algo tan apetitoso así de entrada? Está todo estudiado, los colores, la ubicación de los productos, y nosotros entramos a saco… Feliz día 😀

  5. Me encantó leer el post y ver las diferencias que hay en el menú con Ikea Israel… Por un lado están las diferencias obvias: aca la comida es kosher, o sea que no venden frutos del mar y esas cosas (solo hay salmón), y el “restaurant” está separado de la cafetería (donde están los lácteos). Y por otro están las diferencias de “preferencias gastronómicas”, por ej. aca venden hummus y mucho pollo, y no hay puré. Nosotros vamos seguido a comer con las criaturas cuando no tenemos ganas/tiempo de cocinar, la comida es rica, está lista al toque y es baratísima. Soy fan de las albóndigas suecas!

  6. Adrián,

    😀

    Ayita, Silvina Zitto, Perla, Ana,

    claro que tienen que ir!

    Betty,

    desde la mañana temprano hasta las 5pm pero porque íbamos despacito, era la primera vez para Natalia!

    Fer,

    uh, gracias ahora me fijo!!

    Georgi,

    siiiii!

    Norma,

    es cierto, corrés peligro de quedar rechonchita! 😀

    Sopa Azul,

    es cierto, uno el postre por ahí lo evita. Si lo ves primero, lo agarrás!

    Mechi,

    no me digas! Yo que no soy vegetariana, ni loca me como un pancho!!! 😀 Pero tendría que penar en tu recomendación!

    Julia,

    ay no me digas que dan hummus, qué rico!!! A mí las albóndigas suecas no me parecen gran cosa, pero son gustos!

  7. Acoto:
    – Si vas con bebés, tienen papillas gratis para el infante y sección especial en el comedor con chiches para que los niños campen a sus anchas.
    – Si tenés tarjeta Ikea Family (que es gratis), el café es GRATIS, y siempre tenés alguno de los platos con descuento.
    – Las pepparkakkor del supermercadito son un vicio MAL.

    Dicho esto, me encanta como desde “lo global” que supone una tienda repartida x toda Europa y Norteamérica, con miles de productos made in Cheapland y cosas como el recorrido fijo, el autoservicio y tal, promueven “lo local”: la cultura sueca, sea en la comida, la estética de sus diseños, o los datos que te tiran casualmente en el catálogo o los eventos que organizan en la tienda.

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